Presentación #21BOGOSHORTS - Por Jaime E. Manrique, fundador y director
EXISTIR SIN MIEDO, NOS LO PIDE EL CUERPO
El ejercicio de la creación suele, contradictoriamente, consolidarse en el lugar de lo etéreo, donde supuestamente nada existe, pero en realidad ahí está todo: la idea. Antes de que se materialicen, las ideas son esa energía arrolladora que nos moviliza: una energía que inspira la libertad pudiendo, incluso, volverse una cárcel, tan liberadora como angustiante, llena de urgencia, pero sedienta del tiempo que le permita respirar. Y para que la vida siga fluyendo es necesario que las ideas se vuelvan realidad y adquieran cuerpo. Les presento un evento donde a las ideas les pasa eso.
Sin embargo, ese no fue el punto de partida para dedicar una edición de BOGOSHORTS al cuerpo. El punto de partida, realmente, fue enfrentar una hermosa edición de la luz en 2022 en donde, pese a su magia y a las miles de energías creadoras que se hicieron presentes en muchos sentidos para celebrar los primeros 20 años de este proyecto ambicioso, pude palpar la oscuridad de la envidia, el deseo de destrucción, la expansión de los pequeños radicalismos personales y el esfuerzo descomunal de algunos por imponer su punto de vista, sin importar el daño que hicieran en el camino.
Comprendí que esa edición de la luz, como la llegada al final del túnel, no sería el puerto para arribar. De forma reveladora, sería el desembarco en una tierra más retadora, una tierra con un nuevo aire. Había que intentar equilibrar el conjunto: el amor poderoso de quienes han creído en el corto como movilizador de ideas, sentimientos y esperanzas para una cinematografía y algunas generaciones de cineastas y creadores (aquellos que desde las posibilidades que ofrece BOGOSHORTS han recibido impulso, apoyo, cariño o, quizá, simplemente inspiración) y la oscuridad de los que necesitan ver el mundo funcionar a su imagen y semejanza o, en caso contrario, arder. Así, la claridad emergió del fango. Tras madurar estas ideas, un nuevo punto de partida, una nueva razón esencial, guiará nuestras acciones de ahora en adelante: el respeto a la diferencia.
Inauguración #20BOGOSHORTS
Ese respeto es algo que damos y recibimos. Obligatoriamente, implica reciprocidad, pero, sobre todo, una empatía consciente y el esfuerzo decidido por tratar de habitar sin juicios la piel del otro, sus miedos y angustias, sus dolores, pero también sus sueños y alegrías. Y ¿cómo saber si lo que recibimos nos sirve a la luz de lo que somos? No hay de otra, tenemos que conocernos para también poder exigir el respeto que estamos dispuestos a dar. El primer lugar desde el cual damos y pedimos respeto es el lugar de nuestra existencia física: el cuerpo. Esa materia que nos define es, al mismo tiempo, un concepto. Es el cuerpo de aquello en lo que creemos, el cuerpo de nuestras ideas y, por qué no, el cuerpo extraño que somos y que aún intentamos descubrir. Todo es cuerpo, incluso lo que no existe.
Así pues, se vienen para BOGOSHORTS varios años en donde la búsqueda será encontrar las formas narrativas para abordar las múltiples reflexiones necesarias y, tarde o temprano, incómodas sobre cómo encontrar herramientas conceptuales que nos permitan abordar como centro del pensamiento el respeto a la diferencia. La primera que proponemos es el cuerpo, que incluso en toda la extensión de sus posibles significados, acepciones e ideas, se nos queda corta, pero es un funcional punto de partida.
Frente a nuestros ojos, en nuestro tiempo, en medio de una época donde se nos hace evidente que nada aprendimos, las invasiones y los genocidios son la anormalidad que se normaliza enfermándonos lentamente. Nos agobia no poder hacer nada, pero no es cierto, sí podemos hacer algo: desde nuestros micromundos podemos abogar por respetar a los que no son como yo, porque todos debemos poder caber, sin sufrimiento y sin miedo a existir, de la forma en que cada uno desee hacerlo.