Fotografía: Mónica Bonilla |
Carlos Vicente de Roux - A la Secretaría de Movilidad y a la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá, ETB, les ha quedado grande el montaje del Sistema Inteligente de Transporte. Rivalidades de vieja data entre funcionarios de las dos entidades, debilidad científica y técnica, intrigas de proveedores y rumores de corrupción, son algunos de los factores que han afectado el proyecto. Y solo podrán superarse con un liderazgo y una visión de alto nivel que brillan por su ausencia desde hace años.